Son muchas las tradiciones y eventos que forman parte de la cultura de nuestro país y que terminan definiéndolo en parte. Debemos sentirnos orgullosos de la España de hoy, que se nutre de muchos de esos eventos y tradiciones, así como de la pluralidad de lenguas cooficiales, de una gastronomía que es una de las mejores del mundo, de una historia que llama la atención de propios y extraños y de un arte que, sin duda, está muy bien valorado por gente de los cinco continentes del planeta. No todos los países del mundo se encuentran en nuestra situación.
En los párrafos que siguen, vamos a hablar de una de las tradiciones, o conjunto de las mismas, que está más arraigada en el interior de nuestras fronteras. Es la que tiene que ver con la participación en los juegos de azar, especialmente refiriéndonos a la lotería. Todas las personas que os encontráis leyendo estas líneas tenéis a algún amigo o a algún familiar que juega recurrentemente a la lotería. Es posible que incluso vosotros y vosotras mismas lo hagáis. No es extraño en absoluto. Son millones de personas las que lo hacen a lo largo y ancho de nuestro territorio.
Para evidenciar lo que acabamos de contar, hemos echado mano de un estudio publicado por el portal web Statista y que recoge el porcentaje de población entre 18 y 75 años que participó en algún juego de azar a lo largo del año 2020. Como podéis ver, la participación en la Lotería Nacional es tremenda puesto que llega a situarse en un porcentaje del 72,5%. En el segundo escalafón, encontramos concursos como el Euromillones o la Primitiva, que acumulan un porcentaje del 36’6%, que tampoco está nada mal. Como veis, los datos refrendan que esa participación en juegos de azar forma parte de la cultura de nuestro país.
Es cierto que hay determinados momentos del año en los que la participación en la lotería es mucho más tradicional. Es exactamente eso lo que ocurre con la Lotería de Navidad. Según un artículo que fue publicado en la página web España Fascinante, el sorteo de la Lotería de Navidad marca, para toda la población de nuestro país, el inicio de cada periodo navideño. Y es que es el 22 de diciembre cuando empezamos a sentirnos en fiestas. Son millones y millones de españoles y españolas los que ven el sorteo por la televisión acompañado de un buen chocolate con churros. Nada mejor para empezar la Navidad, ¿verdad?
El arraigo de El Gordo de Navidad es algo que nunca se ha puesto en duda en España y que cada año se demuestra de una manera más intensa. En lotería La Piedad nos han indicado que, además de la posibilidad de convertirse en millonaria, el motivo principal por el que la gente participa en este sorteo es el de sentirse parte de un evento del que está pendiente toda España. Además, y según ha revelado un estudio realizado por la propia entidad, cada año crece el número de extranjeros afincados en España que participa en este sorteo, queriendo de este modo formar parte de una de las tradiciones con más arraigo de nuestro país.
La responsabilidad por bandera
Hay que tener en consideración el asunto de la responsabilidad con los juegos de azar. Por suerte, en El Gordo no suele haber problemas en este sentido porque no hay participación de menores de edad y porque no suele ser habitual que una persona se deje un verdadero dineral en décimos. De hecho, la fórmula que se está extendiendo en los últimos años es la de compartir ese décimo, especialmente si somos un grupo de amigos o de colegas de trabajo.
Podemos decir, por tanto, que la Lotería de Navidad también es una tradición que sirve para socializar con nuestro entorno, que nos hace sentir parte de algo y que, desde luego, sirve para ganar confianza entre un determinado número de personas. Esto es importante ya que habla de una función social muy interesante y que permite que la gente se integre con su entorno, con los beneficios que eso conlleva. Es de justicia decir que no todas las tradiciones hacen eso posible.
Por varias de las cosas que hemos venido comentando a lo largo de todos estos párrafos, creemos que la Lotería de Navidad goza de una excelente salud y que va a seguir formando parte de un conjunto de tradiciones muy arraigadas en España. Hemos hablado que incluso los extranjeros que viven aquí forman parte de ella y no hay una prueba mejor que esa para defender nuestra tesitura. Seguro que muchos y muchas ya estáis esperando con vehemencia el 22 de diciembre a pesar de que todavía estemos rodeados de calor. No es para menos.
