A pesar de los recortes, España sigue teniendo uno de los sectores públicos más potentes de todo el mundo. Y lo tiene en numerosos sectores: Sanidad, Servicios Sociales, Educación… Esto es básico para garantizar el Estado del Bienestar del que tanto presumimos y que te han atacado por otro lado ha sido en los últimos años. Es imprescindible que valoremos y defendamos los servicios públicos que hemos conseguido entre todos y todas porque, de lo contrario, corremos el riesgo de perderlos más pronto que tarde. En otros países así ha ocurrido a lo largo de su historia y, por desgracia, en España también sabemos de primera mano lo que es que nos quiten derechos de un plumazo.
En los párrafos que siguen, vamos a hablar de uno de los aspectos que ya hemos mencionado. Nos referimos al plano educativo, que es fundamental para muchas cosas, como garantizar nuestro futuro como sociedad, además de para mantener una conciencia crítica acerca de todo lo que ocurre a nuestro alrededor. No cabe la menor duda de que una sociedad sin educación es una sociedad que tiene todas las de perder en lo que respecta a mejora de la calidad de vida. Ni siquiera un milagro sería capaz de salvar un territorio en el que ocurriera algo similar. Por eso, todos los países y regiones del mundo apuestan, algunos más y otros menos, por un modelo educativo.
El sistema y todas las personas que lo componen se tienen que ir actualizando año a año por razones obvias. Hay muchas personas que se jubilan y que necesitan un reemplazo rápido para que el servicio que están prestando no desaparezca y para que de él se beneficien todas esas personas que lo solicitan. Además, nos encontramos en un momento en el que se está jubilando una gran parte de los profesores de este país y en el que es necesario un relevo generacional que sea eficaz y que esté perfectamente preparado para cumplir con su misión.
De la generación del Baby Boom del siglo XX, ya son muchas las personas que rozan la jubilación. En el plano público, en concreto en lo que respecta a Educación, hay una gran cantidad de personas que se encuentra en esa tesitura y para la que se necesita relevo. Esto hace que, inevitablemente, se haya tenido que aumentar el número de plazas dedicadas a cubrir vacantes en colegios e institutos. Desde Preparador Oposición Infantil nos han comentado que, al aumentar la oferta de empleo en este campo, también ha crecido la cantidad de personas que se han inscrito en una oposición educativa y que, por tanto, se encuentran preparando las pruebas en el momento actual.
La pandemia lo ha complicado todo
Que el coronavirus arremetiera contra la salud pública durante la primavera del 2020 hizo que muchos de los planes de relevo generacional que tenían en mente las administraciones públicas ligadas a la Educación se retrasaran. Prueba de ello es la noticia que os vamos a enlazar a continuación, del diario El Mundo, que indica que 13 autonomías retrasaron de 2020 a 2021 las oposiciones que tenían previstas. No quedaba otro remedio para garantizar esa necesidad de relevar a parte del personal y hacerlo en unas condiciones que salvaguardaran la transparencia del proceso y la igualdad de oportunidades para todos los candidatos y candidatas.
Otro artículo, ahora del diario ABC, indicaba que, en lo que estaba relacionado con la Comunidad Valenciana, se habían retrasado a 2022 las oposiciones por las cuales se ofertaban 2.500 plazas para la sección de Educación Infantil. La pandemia no está dejando tregua y la verdad es que todos y todas, en nuestro trabajo y en nuestras familias, lo estamos notando de una manera bastante grande. Vivimos uno de los periodos más difíciles de todos cuantos hemos pasado y eso nos afecta no solo en la salud, sino también en materia de inseguridades. Y es que, si por algo se caracteriza esta situación, es por la inestabilidad que viene provocando a todos los niveles.
Está claro que, en algún momento, saldremos de esta y que todo podrá volver al fin a la normalidad. Por fortuna, la creación de la vacuna se ha producido de una manera bastante rápida y ahora dependemos en buena medida de cuestiones logísticas y de distribución para que llegue nuestro turno y podamos permanecer a salvo de las consecuencias más trágicas del virus. En España somos 47 millones de personas y hay que establecer prioridades a la hora de vacunarse. Hay que tener paciencia y aguantar un poco más. En cuanto pasen unos meses, habremos conseguido superar esta situación y la educación volverá a ser la que siempre ha sido en nuestro país: una educación de calidad y que nos ha convertido en un país libre.