Que la situación es complicada para cualquier sector es algo obvio, y que el turismo mueve la economía de España, o por lo menos gran parte de la misma, lo sabemos todos, pero ¿sabéis que España es también uno de los países que alimenta a Europa? El sector agrícola está siendo machacado, menospreciado y vilipendiado, y sin embargo han estado ahí dejándose las manos cuando ha hecho falta, durante el confinamiento, dando el 100% de sí mismos. ¿Cuándo vamos a devolverles el favor?
A veces pienso que no nos damos cuenta ni de lo que han pasado, ni de lo que están pasando, ni de lo importantes que son para nosotros. ¿Alguien se ha parado a pensar que sin la agricultura española perderíamos muchísima capacidad de acceder a un montón de alimentos frescos? Si a eso le añadimos que, como ya hemos comentado, proveemos de frutas y verduras a gran parte de Europa ¿de verdad no nos damos cuenta de lo importante que es proteger este sector?
Es como el tema del cambio climático, no entiendo hasta qué punto alguien puede estar tan ciego como para no ver que necesitamos este planeta lo más sano posible, y eso significa que debemos protegerlo y cuidarlo. Ante esto, el cambio climático es el enemigo ¿y qué hacen muchos? Pues directamente niegan su existencia y muchos de los que no lo niegan hablan mucho pero hacen poco.
Todo afecta
Lógicamente siempre ha habido tormentas fuertes que destrozan campos de cultivo y meses secos sin gota de lluvia que hacen tambalear la salud de miles de hectáreas de campos agrícolas pero lo que está pasando ahora con el cambio climático no había pasado nunca. Esos cambios tan extremos, del frío al calor, de la sequía a las tormentas torrenciales que inundan cientos de kilómetros y obligan a abrir presas para evitar su desbordamiento e incluso su rotura, y por supuesto, tormentas con granizo que arrasan todo tipo de cultivos.
Lógicamente todo eso ya estaba afectando a nuestros agricultores y lo único que podían hacer era levantar invernaderos que protegieran parte de esos cultivos pero ¿realmente tenían economía para hacerlo? Por supuesto que no, porque se les compra el género muy barato aunque luego se venda al consumidor mucho más caro y eso significa que ganan lo justo para seguir subsistiendo y de cada 10 que sí pueden instalar nuevos invernaderos hay 100 que no tienen esa capacidad económica.
En Montaje de Invernaderos, una empresa de diseño y construcción de invernaderos agrícolas, nos han explicado un poco la situación que viven prácticamente todas las temporadas: muchísimos agricultores contactan con ellos buscando presupuestos e información con el fin de poder levantar sus invernaderos de cara a la siguiente temporada una vez hayan recibido ayudas del Estado Español o incluso ayudas de Europa, pero luego sin muy pocos los que acaban contratando sus servicios porque esas ayudas no llegan, llegan después de haber perdido el producto tras una tormenta y entonces deben invertir el dinero en salvar la siguiente temporada de cultivo o llegan en menor cuantía de lo esperado. Al final, solo entre un 3% y 5% de los contactos que consiguen se traducen en trabajos y eso es, básicamente, porque los agricultores no pueden permitirse el gasto aunque lo necesiten.
Debido a ello, justo antes del Estado de Alarma por el covid19, ya estaban haciendo huelgas y manifestaciones por toda España. Necesitaban ayuda ya antes del coronavirus y lo estaban pidiendo desde hace año y a gritos.
El Gobierno de coalición ya estaba buscando medidas para darles, por fin, algo de alivio, pero justo entonces llega la crisis sanitaria y, por supuesto, todo queda paralizado en pro de salvar vidas ¿Y sabéis que hacen ellos? Se lanzan a sus campos para mantenerlos, seguir trabajándolos y recolectar sus productos con el fin de que no falte de nada en supermercados y tiendas de ultramarinos.
Conclusión, nosotros sin ellos no podemos sobrevivir y ellos sin nosotros tampoco así que ¿por qué no hacer que esa relación sea equilibrada? Actualmente y en mi opinión, es bastante parasitaria ¿no creéis?
También, por supuesto, hay empresarios propietarios de campos de cultivo que se aprovechan de otras personas. No quería acabar este artículo sin hablar de ellos porque esta realidad también existe. Contratan a personas de otros países que vienen a España solo para trabajar los campos, les pagan poco y mal, les hacen vivir en espacios reducidos sin las condiciones higiénicas mínimas garantizadas y, por supuesto, cuando han cerrado fronteras y no han podido traer hasta España a esto inmigrantes, se han quedado sin mano de obra.
Hay que regular todas estas situaciones, hay que darles ayudas, hay que garantizarles un precio mínimo de producto aceptable y hay que proteger al trabajados del campo, sea español o no, y todo eso hay que hacerlo más pronto que tarde ¿no estáis de acuerdo?