En la alimentación española podemos disfrutar y presumir de muchos alimentos. Me viene a la cabeza el aceite, los vinos, los embutidos, la carne e incluso en algunas zonas el marisco. Pero hay unos pequeños que son muy valorados, pero que quizás no tienen la repercusión que merecen. Ahora bien, cuando se conocen los frutos secos españoles ya no quieres tomar otros. Y de esto saben mucho en Frutos Secos del Carmen donde tienen productos 100% nacionales. Nos damos una vuelta para que los conozcas y sepas sus impresionantes beneficios.
Nuez española
La nuez es un alimento que nos encanta, sobre todo en inviernos, ya que nos aportan mucha energía y son perfectas para nuestra salud. Pues bien, si encima las comemos con ADN español, pues mucho mejor. Si comes la nuez de nogal española en mitades 100%, partida y pelada a mano de tamaño grande en calidad Premium Extra. La nuez española se distingue de otros tipos de nuez de nogal por un sabor ligeramente más fuerte. Y lo vas a encontrar con una alta calidad a buen precio.
Su consumo moderado -especialmente indicado para personas que realizan esfuerzos físicos, diabéticos, vegetarianos y para quienes padecen de estreñimiento-, ayuda a proteger al organismo de enfermedades coronarias, al reducir los niveles de colesterol. Las nueces son el segundo alimento más rico en antioxidantes de todos los alimentos vegetales, según estudios llevados a cabo por el nutricionista noruego Halvorsen, en 2002. En este caso, se usa cruda en postres o ensaladas. También sirve para decorar guisos, combina bien con la pasta y en ensaladas. Se utiliza para elaborar pasteles, tartas y licores.
Chufa
Ahora nos vamos a Valencia, porque no hay nada más valenciano que las Fallas y la horchata. Por eso apostamos por la chufa, que es ideal para consumir directamente o para elaborar la mejor horchata, el suave clima mediterráneo ha conseguido una chufa dulce y de exquisito sabor. Las chufas son una rica fuente de nutrientes entre las que destacan las vitaminas C y E, y minerales como el fósforo, el magnesio, el potasio, el calcio y el hierro además de almidón, grasas insaturadas, proteínas y unas enzimas que facilitan la digestión.
Piñón
Hablar de piñón es hacerlo del oro del bosque. El pino (Pinus pinea), especie nativa de las regiones mediterráneas, ya conocida desde la antigüedad, es un árbol majestuoso que puede alcanzar los 25 m de altura. Su fruto (estróbilos), las piñas, son solitarios, formados por escamas leñosas entre las que se disponen las semillas, grandes y revestidas de una cáscara leñosa, cubiertas de un polvo negruzco, en cuya parte interna se aloja el embrión comestible. La piña, tesoro de la dieta mediterránea, es un fruto muy rico en almidón y en aceites (un 50% de grasas de buena calidad, predominando los ácidos grasos mono y poliinsaturados; se conservan poco tiempo, porque su grasa se enrancia con facilidad); además de poseer un agradable sabor, las piñas tienen un gran aporte en proteínas (20 % de su peso); los legionarios romanos llevaban piñones como parte de sus provisiones de campaña.
Altramuz
Si eres andaluz sabrás de lo que hablamos, y si vas de vacaciones a Andalucía también. Y es que no hay bar o restaurante donde no te pongan altramuces. Son como las pipas. El altramuz remojado, como nos indican desde Frutos Secos del Carmen, es una de las legumbres que menos grasas aporta. Y de lo que aporta, sin duda es de destacar que son grasas insaturadas buenas para las arterias y el corazón. A destacar que el altramuz es un buen sustituto para las personas que no pueden tomar soja o que simplemente quieren consumir otra proteína vegetal o legumbre diferente.
Nuez de macadamia
La nuez de macadamia es altamente energética por lo que hay que consumirla con moderación, pero sus altos valores nutricionales la convierten en la aliada perfecta de cualquier dieta. Posee un alto contenido en fibra y proteínas, vitaminas del grupo B, vitamina E y vitamina C. Y es que los frutos secos son altamente saludables para nuestro organismo. Este fruto seco tiene una textura muy especial, suave y crujiente a la vez, y su sabor es dulce y sencillo, lo que lo convierte en el fruto seco perfecto para consumir directamente como tentempié o para utilizar como ingrediente en muchísimos platos elaborados, ya sean salados o postres.
Y, ¿ahora qué? Seguro que ya pones en tu listado de productos favoritos de España a los frutos secos. ¿Verdad?